Dame para un refresco!

Un viaje a Mozambique no está completo si no experimentas un "control policial" (por llamarlo de alguna manera). Sé que son muchas las referencias en Internet y en guías de viajes sobre este asunto pero como casi siempre la realidad es diferente. Con esto quiero decir que aquí la poli no es un amigo protector que te va a salvar el culo, más bien todo lo contrario. No quiero ofender al colectivo porque entiendo la situación, generalmente son tipos escasamente preparados y con sueldos de 50 euros, si no me equivoco. Yo creo que en esa situación también me buscaría un poco la vida. Lo malo es cuando esto te coge con un poco de prisa...

Suelen pararte para preguntarte por la documentación (si tu coche lleva matrícula extranjera estás perdido) y acto seguido empieza una conversación, generalmente absurda, que nunca sabes a dónde te va a llevar. Que si te has saltado una línea contínua, que si tienes que llevar autorización por escrito de tu novio para conducir su coche, que si es mejor ir borracho que sin cinturón... Cuando ven que tienes tiempo y que no vas a soltar un duro empiezan otro tipo de charlas ya más de bar. Recuerdo una vez, uno de estos policías me contó que había estado en Rusia ayudando en operaciones militares o algo así y acabamos hablando de lo buenas que estaban las rusas. Yo ni idea del asunto pero como mi amigo no llevaba en pasaporte en regla pues tocó escuchar a la autoridad, que hasta nos dedicó unas palabras en ruso.

Otra vez me pararon tres veces en el mismo dia, esto ya fue demasiado. La matrícula del coche que yo conducía antes era sudafricana con lo cual, carne de cañón! Esta fue precisamente una de las razones por las que dejé de conducir aquel automóvil... Fuerte eh?!!

El proceso suele ser manos o menos igual, la diferencia está en el tiempo que tardan en pedirte "un refresco", que es una manera elegante de pedirte pasta.

Para los que viajen a Mozambique advertirles de esta posibilidad pero también decirles que no participen en el asunto del "soborno", no es bueno para nadie. Sólo hay que tomárselo con calma y buen humor, darles mucho mucho mucho rollo, y esperar a que te dejen continuar. Si habéis cometido una infracción pues lo mismo, aunque en este caso , si la charla no funciona, es mejor aceptar una visita a la comisaría más próxima y pagar la multa, como lo haríamos en nuestro propio país.

Ah! y prohibido conducir de noche!